La principal valentía de este libro es, no solo abordar la complejidad del punitivismo como solucionador de las pobrezas las sociales, si no también esbozar las posibles soluciones para subvertir este falso mito. Conceptos como moderación penal, justicia restaurativa o justicia feminista se presentan de una manera clara y convincente como las principales pistas para dejar atrás el penalismo mágico.